Band Of The Run es el quinto álbum de Paul McCartney tras la separación de The Beatles, y posiblemente uno de los más exitosos tras la desaparición del cuarteto británico más famoso del mundo. Grabado en los estudios EMI en Lagos, Nigeria, una extraña locación elegida por el mismísimo McCartney que podría considerarse hasta un lujo, pues buscaba un lugar exótico como fuente de inspiración para la grabación.
Días antes de la grabación de Band Of The Run, el guitarrista principal y el baterista decidieron dejar la banda, por lo cual Paul se encargó de tocar prácticamente todos los instrumentos; hasta cierto punto pudiera considerarse un álbum solista.
¿Qué podemos escuchar?
Un nivel de composición muy elevado, es por ello que Paul McCartney fue, es y seguirá siendo una leyenda, cada una de las canciones está perfectamente bien pensada y estructurada. Algo que debemos resaltar son los cambios que podemos encontrar dentro del álbum, algo que hizo muy interesantes a los sencillos “Jet” y “Band On The Run”, creando canciones con mucha dinámica, muy ricas para analizar.
Los arreglos del disco son muy buenos, donde encontramos como constante al uso de sintetizadores analógicos, acreditados a Paul y Linda McCartney, mismos que le dan un toque de modernidad, jugando constantemente con los filtros. Asimismo podemos encontrar diferentes elementos percusivos que llenan los espacios de una forma muy elegante, por ejemplo en “Blue Bird”, una canción que fácilmente podría ser de los Beatles, sin embargo, Wings logró darle su toque distintivo añadiendo los coros de Linda.
Band On The Run es definitivamente un álbum musicalmente muy rico, pues dentro de los arreglos también podemos escuchar orquestación, solos de sax, entre otros elementos que hacen de este pop algo musicalmente complejo, como por ejemplo en “Picasso’s Last Words”, donde la banda experimentó con los “Mash Ups” inclusive antes de que se pusieran de moda.
El bajo de Paul McCartney...
Sin duda podemos considerar a McCartney como uno de los mejores bajistas del mundo, presentando un tono seco, pero siempre muy presente, lo más impresionante de todo esto es que lo toca al mismo tiempo de que canta, y en ocasiones interpretando escalas complicadas, como por ejemplo en “Mrs. Vandebilt”, donde afortunadamente en la mezcla se dejó el bajo como un elemento principal de la canción.
La influencia de The Beatles también se ve reflejada, sobre todo en “Let Me Roll It”, con una guitarra y voces muy al estilo de John Lennon, inclusive la mezcla de la voz es idéntica a las producciones de Lennon en sus pasajes más rockeros, con un sonido muy al estilo de “Don’t Let Me Down”, con un delay muy corto que crea una especie de “Eco”.
Asimismo, también identificamos la influencia africana en el coro de “Mamunia”, dando como resultado una canción Inglesa – Nigeriana muy especial y sutil; aquí comprobamos que el entorno donde se graba juega como un elemento más en la composición.
Un maestro de la composición moderna
Es increíble como a pesar de ya haber grabado toda la discografía de The Beatles, Paul McCartney haya tenido la capacidad para seguir componiendo temas memorables, complejos y diferentes entre si. Band On The Run nos demuestra que Sir. Paul McCartney no necesita tener la gran banda para crear himnos memorables, sin demeritar la participación de Linda McCartney y Denny Laine, este trabajo pudo haber salido fácilmente sin su participación y aún así ser un éxito.
¡Una joya Rock Pop que todo amante de la música debe darse la oportunidad de escuchar!